El precio del petróleo continuó su caída en Nueva York este lunes, donde volvió a tocar un mínimo en cerca de seis años a pesar de algunos movimientos al alza durante la jornada y en el marco de un mercado fundamentalmente bajista.

El barril de «light sweet crude» (WTI) para entrega en marzo finalizó con una caída del 0,9% (o 44 centavos) a u$s 45,15 en el New York Mercantile Exchange (Nymex), su valor mínimo de cierre desde el 11 de marzo de 2009, cuando se cotizó a u$s 42,33.

«El mercado intentó superar el shock inicial del resultado de la elección griega», que llevó al poder al partido antiausteridad Syriza, pero el pesimismo de los operadores ganó una vez más la partida, haciendo que los precios lleguen a nuevos abismos, destacó Phil Flynn, de Price Futurs Group.

Los representantes del partido de la izquierda radical griega Syriza centraron su campaña en el rechazo explícito de las políticas de austeridad impuestas por la Unión Europea.

«Sin embargo, parecería que es posible negociar y el tono no es tan negativo como era esperable», lo que explica los breves intentos del mercado de retornar al alza, comentó Bob Yawger, de Mizuho Securities.

Además, el barril de crudo Brent para misma entrega cerró en el mercado de futuros de Londres en u$s 48,16, un 1,3% menos que al término de la sesión anterior. El crudo del mar del Norte, de referencia en Europa, culminó la sesión en el International Exchange Futures (ICE) con un retroceso de 0,63 dólares con respecto a la última negociación, cuando finalizó en u$s 48,79.

El precio del crudo sufrió un retroceso, tras la muerte del rey saudí Abdalá bin Abdulaziz. Su sucesor, Salman bin Abdulaziz, parece decidido a llevar a cabo una política continuista respecto a los niveles de producción del primer fabricante mundial de petróleo.

Según los analistas de Commerzbank, parece que «Arabia Saudita va a continuar inundando el mercado de petróleo para intentar, a través de la baja de los precios, ahuyentar a los productores estadounidenses de crudo de esquisto».

Sin embargo, Matt Smith, analista de Schneider Electric, dijo que se vislumbra luz al final del túnel por las declaraciones de El Badri. Los precios seguían lastrados por la fortaleza del dólar, moneda en la cual están denominadas las compras de crudo, lo que penaliza las compras.