Muy bien en el norte del país, bien en la Patagonia y, salvo la provincia de Buenos Aires, con mucha tela para cortar en la región central. Así resume Sergio Massa el estado actual del armado que necesita para alcanzar la presidencia en octubre. Falta un dato: con elecciones anticipadas en distritos clave como Santa Fe, la ciudad de Buenos Aires, Córdoba y Mendoza, donde -encima- Pro aparece más firme, se agiganta la urgencia del líder del Frente Renovador (FR) por fortalecer las alianzas y evitar llegar a las elecciones nacionales con un clima desfavorable.

En el bastión del socialismo, Massa tiene en carrera dos candidatos a gobernador: el ruralista Eduardo Buzzi y el diputado Oscar Martínez, que tras las internas del 19 de abril deberán transpirar para meterse en una elección que se anticipa polarizada entre el candidato que se imponga en las PASO del oficialismo (el socialista Miguel Lifschitz o el radical Mario Barletta) y el referente de Pro, Miguel Del Sel.

Massa buscará en simultáneo hacerse fuerte en las elecciones municipales de las seis ciudades más pobladas de Santa Fe. Como el cronograma permite que los candidatos locales se metan luego en las listas nacionales, cada voto que le reste a Pro valdrá doble. La incógnita de siempre es qué hará el senador Carlos Reutemann. Massa nunca dejó de contarlo como aliado. También tocará la puerta de Barletta y el socialista Rubén Giustiniani, tras las PASO, para sumarlos a su boleta nacional.

La situación parece más difícil en la ciudad de Buenos Aires, donde Massa viene prometiendo que sorprenderá con un candidato «de peso nacional» para las internas del 26 de abril. «La semana que viene», dice. Después del 18-F. Nadie descarta que si ese candidato misterioso no despega termine ayudando por lo bajo a la senadora Gabriela Michetti, querida por las encuestas, pero no por el aparato macrista.

La tercera incógnita es Córdoba, que votaría a fines de junio. Massa espera anunciar su candidato en 10 días. El senador Luis Juez dice que ya está «apalabrado» con Macri. El ex ministro Martín Llaryora se quedó con José Manuel de la Sota, el gobernador que ya no da señales de cercanía con Massa. Aunque cuesta hablar de puentes cortados entre dos que vuelan. El tigrense tiene dos apuestas firmes: la candidata a la intendencia capitalina, Olga Riutort, y el ruralista Carlos Garetto, para legislador nacional.

La última parada difícil sería Mendoza. Si Massa lanza una fórmula entre el cirujano Claudio Burgos y al presidente de Fecovita, Eduardo Sancho, podrían acusarlo de sabotear al radicalismo. Por eso, en las conversaciones que tuvo con Alfredo Cornejo, el candidato radical-macrista a la gobernación, Massa propuso acompañarlo, pero con una lista de legisladores propios.

Hasta allí los desvelos massistas en los distritos grandes, que podrían compensarse con una buena performance bonaerense, donde con varios candidatos el tigrense le saca ventaja a Pro en las encuestas y, desde la muerte de Alberto Nisman, percibe que el sciolismo se desinfla en su favor.

Las mejores noticias llegan desde el Norte, donde pesan las alianzas -en Tigre ya habla de «acuerdos sellados»- con los radicales Gerardo Morales (Jujuy), José Cano (Tucumán), Luis Naidenoff (Formosa) y Nito Artaza (Corrientes, donde también habla con el gobernador Ricardo Colombi), a los que Massa les aporta votos y aliados peronistas para derrotar al kirchnerismo. No les pide excluir a Pro, aunque en algunos casos no hace falta.

En Salta, que tendrá internas el 12 de abril, Massa apostó por la dupla de Juan Carlos Romero y Alfredo Olmedo para una batalla que ya no parece imposible frente al gobernador kirchnerista Juan Manuel Urtubey. El macrismo se quedó sin candidato.

Otro que sorprenderá adelantando comicios será el gobernador rionegrino, Alberto Weretilneck, aliado y candidato de Massa, que mira al Sur con optimismo, pese a la falta de certezas de su armado nequino. En Tierra del Fuego ya avanzó en acuerdos con el Mopof de Jorge Garramuño y con el radical Federico Sciurano. En Santa Cruz busca acercarse al radical santacruceño Eduardo Costa. En La Pampa postulará al empresario Miguel Calamari. En Chubut espera que un triunfo arrollador de su aliado Mario Das Neves.