La noticia de nuevos despidos en el sector petrolero puso otra vez en alerta al gremio, que negocia en Buenos Aires y en Neuquén para evitar la pérdida de puestas de empleo.
Por un lado, la contratista argentina Estrella envió telegramas a 45 trabajadores alegando la parálisis de dos equipos en Vaca Muerta. Por el otro, el grupo de las cuatro principales empresas internacionales de servicios amenazó con despedir a 190 empleados más, que se sumarían así a los 250 ya cesanteados.
Por acción del Ministerio de Trabajo de Nación, tanto en su dependencia central en Buenos Aires como en su delegación local, los despidos de Schlumberger, Halliburton, Baker y Weatherford están en suspenso.
Al cierre de esta edición, desde Trabajo aseguraron que Estrella no había acatado la conciliación, por lo que las 45 cesantías seguían vigentes, aunque aún sin las liquidaciones.
El caso de la empresa argentina se conoció el viernes pasado. Alega que de los tres equipos que tenía en operación para YPF, sólo uno quedó en pie y por eso deben tomar la medida.
La firma Estrella se vio involucrada en una tragedia el año pasado cuando un soldador perdió trágicamente la vida mientras trabajaba en una pileta de lodos.
En medio de las negociaciones, el titular del sindicato petrolero, Guillermo Pereyra, se mostró «muy preocupado por la situación». «Se van terminando las épocas de oro», señaló en diálogo con LU5 y remarcó que no optarán por el paro porque esa podría ser la excusa para que se produzcan «1.500 despidos» más.
El tema estalló además en medio de una complicada paritaria, donde los trabajadores esperan una recomposición salarial.
RioNegro